lunes, 23 de junio de 2008

Los puentes y los recuerdos eternos

Nos gustaría compartir las siguientes enseñanzas del élder Dennis B. Neuenschwander. Éste es un pasaje de "Los puentes y los recuerdos eternos",(Liahona, julio de 1999, págs. 98–100). Esperamos que le resulte útil al trabajar con los miembros de su barrio.

La historia familiar crea puentes que conducen al templo. La obra de historia familiar nos conduce hacia el templo. La historia familiar y la obra del templo son una sola obra. Las palabras historia familiar nunca se deberían decir sin asociarlas con la palabra templo. La investigación de historia familiar debe ser la fuente principal de los nombres que se obtienen para las ordenanzas del templo, y las ordenanzas del templo son la razón primordial por la que se debe llevar a cabo la investigación de la historia familiar. El presidente Gordon B. Hinckley ha dicho: "Todo nuestro vasto esfuerzo de historia familiar está orientado hacia la obra del templo, y no tiene ningún otro propósito.”

La investigación de la historia familiar proporciona el puente emocional entre las generaciones; y las ordenanzas del templo proporcionan el puente del sacerdocio. Las ordenanzas del templo son la ratificación del sacerdocio en cuanto a la conexión que ya hemos establecido en nuestro corazón. Madre Teresa dijo que "la pobreza más terrible es la soledad y el sentimiento de no ser apreciado". La idea de que esa pobreza de soledad, de no ser apreciados y de estar separados de nuestros seres queridos puede extenderse más allá de esta vida, es realmente triste. La promesa de la historia familiar y de la obra del templo es la conexión eterna nacida tanto del amor como de las ordenanzas del sacerdocio.

Hermanos y hermanas, la historia familiar y la obra del templo son los recuerdos familiares eternos que crean puentes; crean puentes entre las generaciones de nuestra familia, puentes que llevan a la actividad dentro de la Iglesia y puentes que conducen al templo.

jueves, 19 de junio de 2008

Historia Familiar - Su importancia en nuestra vida


"¡Cuántas veces he deseado que se quitara el velo de sobre la faz de los Santos de los Últimos Días! Cómo deseo que pudiéramos ver y conocer las cosas de Dios, como aquellos que están obrando por la salvación de los de la familia humana que se encuentran en el mundo de los espíritus: porque si así fuera, todo este pueblo, con muy pocas excepciones, si acaso las hubiera, perdería todo interés en las riquezas del mundo, y en su lugar, sus íntegros deseos y obras se orientarían hacia la redención de los muertos". (Pte. Wilford Woodruff, Discourses of Wilfor Woodruff, pág. 153)

miércoles, 18 de junio de 2008

Conversión: Un proceso de refinamiento

"Debemos esforzarnos por oír las interpretaciones del Espíritu en vez del entendimiento del mundo. Debemos tener corazones y mentes receptivos, aceptar el camino del Señor y, si es necesario, cambiar nuestro modo de vivir. La conversión personal se logra al empezar a vivir como el Señor desea que vivamos firmes e inmutables en guardar todos los mandamientos, no sólo los que nos convengan. Esto llega a ser un proceso de refinamiento si nos esforzamos para que cada día sea mejor que el anterior; de este modo, nuestras tradiciones se convierten en tradiciones de rectitud."(Cheryl C. Lant, Liahona mayo 2008, pág.13-14)

lunes, 16 de junio de 2008

Porque ir a la Iglesia??

Un asiduo asistente a la Iglesia le escribió al editor de un periódico quejándose que no tenía sentido ir a la Iglesia todos los domingos:

“He ido durante 30 años”, escribía, “y durante ese tiempo habré escuchado como 3.000 sermones. Pero juro por mi vida que no recuerdo ni uno sólo de ellos. Por eso pienso que estoy perdiendo mi tiempo, y los sacerdotes también dando sermones”.
Así empezó una controversia en la columna de “Cartas al Editor”, para deleite del mismo editor.

La misma que continuó por varias semanas hasta que alguien escribió lo siguiente:
“Ya llevo casado 30 años. Durante todo ese tiempo mi esposa debe haber preparado 32.000 comidas, y juro por mi vida que no me acuerdo de ni un solo menú. Pero sí sé esto: Todas me alimentaron y me dieron la fuerza que necesitaba para hacer mi trabajo. Si mi esposa no me las hubiera preparado, estaría físicamente muerto el día de hoy. ¡De la misma manera, si no hubiese ido a la Iglesia para alimentarme, estaría espiritualmente muerto en la actualidad!”.

Meditemos en esto cuando nos quejemos del porque hay que ir a la iglesia!!

La paciencia

Una joven decidió plantar un cantero de flores abundantes y colorido, colocó una planta junto con otra hasta que el cantero estaba abarrotado de flores pero en vez de seguir creciendo estas se marchitaron y murieron.

Si les hubiera dejado espacio suficiente para crecer habrían llegado a engalanar el jardín pero debido a su impaciencia la joven no había dado a las flores todo su potencial.

A menudo tratamos de acelerar nuestro crecimiento y de quienes nos rodean en vez de de dejar que el tiempo dé sus resultados, nos desanimamos rápidamente en vez de ver las cosas desde una perspectiva mas amplia, nos transformamos en nuestros peores críticos y nos damos por vencido sin tener en cuenta que estamos en pleno progreso. Es esencial que tengamos paciencia si es que habremos de disfrutar lo que la vida tiene para brindarnos, una familia, oportunidad de crecer, talento, paz y felicidad; si no tenemos paciencia el capullo jamás llegara a ser una flor y nos privaremos a nosotros mismos de toda la dicha que la vida tiene para ofrecer.

Sin paciencia no podremos superar flaquezas y terminamos por abandonar todos los desafíos que no podamos conquistar fácilmente.

La paciencia es una virtud que vemos en un niño al tratar algo nuevo una y otra vez. La paciencia con los demás es una forma de caridad. Cuando tenemos confianza en que las cosas mejoraran llenamos de esperanza a nuestros seres queridos.

La paciencia nos permite dotar a otras personas del poder de crecer a su propio ritmo, cuando nos abstenemos de juzgar a otros o hacemos una pausa antes de reaccionar entramos en una esfera mas tranquila y pacífica. El stress disminuye, el nivel de dicha crece y todos en nuestro alrededor sienten el calor de la aceptación que fomenta el crecimiento.

Todo hermoso jardín comenzó por ser un pedazo de tierra que llegó a ser hermoso porque alguien estuvo dispuesto a esperar.

viernes, 13 de junio de 2008

CAMBIO EN LAS RECOMENDACIONES PARA EL TEMPLO

El miércoles 11 de junio 2008 tuvimos una capacitación los obispos con respecto al nuevo sistemas para recomendaciones para el templo, cabe recalcar que nosotros somos el 2do. país fuera de los Estados Unidos en el que ya se está aplicando este sistema.
Básicamente ahora las recomendaciones vienen con código de barras, para ayudar a mejorar la seguridad de las mismas.
Este nuevo sistema comienza en nuestra Estaca Guayaquil Ecuador Kennedy y de a poco irá a las demás regiones del país; Por ende ahora en el Templo habrá un computador en recepción para la lectura de los códigos. Se tiene un plazo de 4 meses para cubrir con el reemplazo de las recomendaciones sin código de barras. El encargado de esta dura labor de ingresar los códigos en la PC es el Secretario de la Estaca.
El Obispado extenderá la recomendación nueva usando la fecha de expedición de la recomendación vigente. Usualmente no se requiere de una entrevista a menos que lo indique el Espíritu, lo ideal sería entrevistar solo a los que les falte por lo menos 6 meses para que se les caduque. (Todo es para este propósito, de ahí en adelante el procedimiento de entrevistas sigue siendo el mismo, no nos confundamos)

Son los pasos gigantes de la tecnología usada en el engrandecimiento de la obra del Señor.

Escrituras con ejemplos de valor


Las sagradas escrituras describen la evidencia de esta verdad. José, hijo de Jacob, el mismo que fue vendido en Egipto, demostró la firme resolución de valor cuando la esposa de Potifar intentó seducirlo: “No hay otro mayor que yo en esta casa, y ninguna cosa que ha reservado sino a ti, por cuanto tú eres su mujer; ¿cómo pues, haría yo este grande mal, y pecaría contra Dios? Y…huyó y salió. (Génesis 39:9-10).
En nuestro tiempo, un padre aplicó este ejemplo de valor a las vidas de sus hijos al declarar: “Si alguna vez se encuentran donde no deben estar, ¡salgan!”.
El profeta Daniel demostró un valor supremo al defender lo que él sabía que era correcto y al demostrar valor para orar, a pesar que fue amenazado de muerte si él lo hacía (vea Daniel 6).
El valor esta caracterizado en la vida de Abinadí, como se muestra en el Libro de Mormón por su buena voluntad de ofrecer su vida en lugar de negar la verdad (vea Mosíah 11:20; 17:20).
Cualquiera también puede ser inspirado por las vidas de los 2,000 hijos de Helamán quienes enseñaron y demostraron la necesidad del valor para seguir las enseñanzas de sus padres, el valor de ser castos y puros.
Quizá cada una de estas historias están coronadas por el ejemplo de Moroni, quien tuvo el valor de perseverar hasta el fin en rectitud (vea Moroni 1:10).
“Él no lo dejará, ni lo abandonará”
Todos fueron fortalecidos con las palabras de Moisés: “Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará”. (Deuteronomio 31:6). Él no les falló. Él no nos fallará. Él no los desamparó. Él no nos desamparará.
Fue este conocimiento que incitó el valor de Colón –dicha resolución de registrar en su barco una lista una y otra vez: “Hoy seguimos navegando”. Fue este testigo el que motivó al Profeta José a declarar, ‘Voy como cordero al matadero; pero me siento tan sereno como una mañana veraniega” (D&C 135:4).

Tenga el Valor de Defender sus Principios

Es esta dulce seguridad que nos puede guiar a usted y a mí –en nuestro tiempo, en nuestro día, en nuestras vidas. “Por supuesto que nos enfrentaremos al miedo, experimentaremos ridículo, y oposición. Tengamos el valor de desafiar el consenso, el valor de defender los principios. Valor, no compromiso, trae la sonrisa como señal de la aprobación de Dios. El valor trae una vívida virtud cuando tiene propósito, no solamente por querer morir como hombre, sino como una determinación de vivir decentemente. Un cobarde moral es alguien que tiene miedo de hacer lo que el cree que es correcto porque otros no aprobarán o se reirán. Recuerde que todos los hombres temen, pero aquellos que enfrentan sus temores con dignidad tienen valor también”.

jueves, 12 de junio de 2008

Templos - La mayor fuente de fortaleza espiritual


"Así como los pioneros tenían una visión más amplia para enfrentar las dificultades de su lucha diaria por sobrevivir, es preciso que también nosotros tengamos una visión más amplia y mayor comprensión de nuestro destino eterno. Nuestros problemas son más sutiles pero igualmente difíciles, y el mantener nuestra fortaleza espiritual es asimismo una lucha diaria. La mayor fuente de esa fortaleza espiritual proviene, como en aquellos tiempos, de nuestros templos."(Pte. James E. Faust, Liahona julio 1997, pág. 22)

miércoles, 11 de junio de 2008

CRIA A TUS HIJOS CON UN POCO DE HAMBRE Y UN POCO DE FRIO


El amor que les tenemos a nuestros hijos nos lleva muchas veces a cegarnos y a olvidar lo que los hará felices a la larga. Es muy común en estos tiempos que los padres de familia, sobre todo los de ciertos recursos económicos, les construyamos un mundo irreal, sacado de un cuento de Walt Disney, así de la realidad.

Cuando tarde que temprano el cuento termina, nuestros hijos se enfrentan a un mundo que desconocen, que no comprenden, lleno de trampas y callejones sin salida que no saben sortear, y las consecuencias son peores a las que quisimos evitar.

Hace poco la imagen de un padre con lágrimas en los ojos conmovió profundamente al mundo entero. Pelé, el gran ídolo del fútbol de los últimos tiempos, quien a diferencia de otras ocasiones, dio una de las ruedas de prensa más tristes y dolorosas de su Vida: su hijo, Edson de 35 años, fue arrestado junto a 50 personas más en la ciudad de Santos Brasil.

El hijo de Pelé fue acusado de asociación delictiva con narcotraficantes y puede ser condenado a 15 años de cárcel. Con lágrimas en los ojos, el ex futbolista brasileño admitió públicamente que su hijo resultó involucrado en una pandilla de traficantes de cocaína arrestados por la policía. Pelé dijo a los medios: "como cualquier padre, es triste ver a tu hijo metido en grupos como ése y ser arrestado, pero él tendrá que sufrir las consecuencias". Y agregó, "desafortunadamente, yo quizás estaba demasiado ocupado y no me di cuenta."

Es lamentable, porque yo siempre he peleado contra las drogas y no noté Lo que pasaba en mi propia casa. Pelé es un personaje mundial admirable como deportista y hombre honesto que no perdió su humildad como otras figuras del deporte. Sin embargo, es triste que un hombre bueno y talentoso como él se haya "distraído" en su jugada más importante: la formación de sus hijos.

La historia de Pelé no es un hecho aislado. Por desgracia es la vida de cientos de padres de familia de estas épocas atrapados en una agenda saturada de trabajo y de fuera de casa. Papás que compensan la falta de atención a sus hijos con bienes materiales. Los inscriben en las mejores escuelas, los rodean de lujos y comodidades y piensan que con eso ya cumplieron con su tarea de padres, cuando lo único que han logrado es formar niños que desconocen el hambre y tiran lo que no les gusta. Hijos tiranos, pequeños monstruos insoportables y prepotentes que sufrirán y harán sufrir a sus semejantes porque desde pequeños se han salido con la suya.

Muchachitos que creen que sentir frío o calor es cuestión de regular el aire acondicionado, que el cansancio que han sentido se limita a caminar unas cuadras porque no hallaron estacionamiento frente a la discoteca, jovencitos que piensan que el trabajo de los padres es firmar cheques para que ellos tengan todo lo que se les antoja.

¿Qué posibilidades tienen nuestros hijos de convertirse en hombres y mujeres de bien si los papás les damos todo y no les educamos la voluntad? ¿Qué hijos estamos formando si con nuestra actitud les enseñamos que el dinero es lo más importante en la vida?

Confucio decía: "Educa a tus hijos con un poco de hambre y un poco de frío". Proverbio 22:6 señala: "Instruye al niño en su camino y aun cuando fuere viejo no se apartara de el” . Cuánto bien hacen los padres a los hijos cuando ponen esa máxima tan sencilla en práctica. Y cuánto daño les hacen al ponerles todo en bandeja de plata.

Hay muchas realidades que como padres quisiéramos desaparecer; el sufrimiento de los hijos, el exceso de sudor, de esfuerzo, y las carencias económicas. Sin embargo, quizás esas realidades no los hagan felices de momento, pero a la larga puedan forjarlos como hombres y mujeres de bien. Ojalá que más padres de familia tengan la inquietud de enterarse por dónde andan sus hijos.

Que no les vaya a pasar que cuando tengan tiempo deban decir: "Estaba demasiado ocupado y no me di cuenta".

martes, 10 de junio de 2008

Albedrío - Decidimos enojarnos..... Enojo - Decisión personal


"El verbo "irritar" se podría poner en una receta para un desastre: 'Haga calentar los ánimos, mézclelos con palabras bruscas hasta que empiecen a hervir; siga revolviendo hasta que adquieran consistencia; enfríelos; deje enfriar los sentimientos durante varios días; sírvalo helado; tiene para rato'. Una parte de la astucia de esta estrategia de Satanás es separar la ira del albedrío, haciéndonos creer que somos víctimas de una emoción que no podemos controlar.Perder el control es una elección interesante de palabras que han llegado a ser comunes. 'Perder algo' implica 'involuntariamente', 'en forma accidental', 'sin querer', 'no responsables', descuidados quizás, pero 'no responsables'.'Me hizo enojar'. Ésta es otra frase que escuchamos y que también implica falta de control o de albedrío; es un mito que se debe refutar. Nadie nos hace enojar. Otras personas no nos hacen enojar. No hay fuerza de por medio. El enojarse en una elección consciente, es una decisión. ¡Nosotros elegimos!(Élder Lynn G. Robbins, Liahona julio 1998, pág.86)

Qué es la Verdad?


En un reciente espectáculo el auditorio quedó perplejo ante la ilusión creada por el mago mas que simplemente sacar un conejo de su sombrero, hacía aparecer flores, palomas y hasta personas de en medio de la nada para después hacerlos desaparecer, los presentes no podrían creer lo que sus ojos veían y al final del espectáculo alguien comentó: “uno sabe que no es cierto pero sí que parece real!”

Las cosas no simple son lo parecen ser, tanto en los espectáculos de magia como con la gente. A menudo la conducta aparenta ser genuina lo que en realidad no lo es, mucho tiempo y dinero se dedican para fabricar una buena reputación aún cuando no exista un comportamiento virtuoso que lo acompañe. Abraham Lincon declaró: “La virtud es como un árbol y la reputación es su sombra, la sombra es lo que pensamos que es, pero el árbol es la realidad”

Nuestra vida puede ser mas pacifica segura cuando prestamos menos atención a las apariencias y nos concentramos en la realidad.
La autenticidad es esencial en las relaciones humanas. Cualquiera puede profesar sentir amor pero nunca significará tanto como una dulce y sincera manifestación de amor. Los amigos por conveniencia son fáciles de encontrar pero aquellos en los que realmente podemos confiar bien vale la pena buscarlos.

Nunca una dadiva fingida igualará un acto de sincera bondad; así como el árbol difiere de la sombra, también lo autentico difiere de lo falso. No hay magia tan magnifica como lo que irradia una persona genuinamente bondadosa.

Cuando hallas a alguien auténtico y verídico habremos hallado el tesoro más grande que hay.

lunes, 9 de junio de 2008

Servicio a la Comunidad



Este sábado 24 de mayo 2008, la obra misional del barrio Los Sauces de la Estaca Guayaquil Ecuador Kennedy realizó una actividad de servicio en la que participaron todas las organizaciones auxiliares, en especial los jóvenes y los niños de la primaria, estos últimos atrayendo los carros lo que causaba mucha simpatía en el sector. Atendimos cerca de 30 carros desde las 10h00 hasta las 13h30.

Con esto queremos recordar a todos que los niños son un instrumento importante en la obra del Señor, ellos siempre están prestos a servir, no olvidemos involucrarlos en las actividades.

La Rectitud: Ingrediente indispensable para la libertad



Teniendo presente la experiencia del Rey Noé y su iniquidad, el Rey Mosíah fue a preguntar a la nación Nefita. Mosíah sabía que sus días terminarían pronto, ninguno de sus hijos había aceptado el trono y el pueblo todavía seguía deseando un rey para que les gobernase.
“He aquí, pueblo mío, o hermanos míos, porque como a tales os estimo, deseo que meditéis sobre el asunto que se os suplica considerar, por cuanto deseáis tener rey.” (Mosíah 29:5)
Después de explicar al pueblo que sus hijos no deseaban el reinado y para evitar futuras contenía o guerra civil, el rey hizo un llamado al pueblo a meditar usando su mejor razonamientos y sabiduría. Entonces el Rey Mosiah propone una nueva forma de gobierno –Jueces elegidos por el mismo pueblo—“por tanto, esto observaréis y tendréis por ley: Trataréis vuestros asuntos según la voz del pueblo.” (vers 26)
Pero con esa misma libertad – El no tener que seguir el dictado de un rey, ya sea justo o inicuo – venia una gran responsabilidad “que si este pueblo comete pecados e iniquidades, éstos recaigan sobre su propia cabeza.” (Vers 30) De manera que esto mismo tiene aplicación en la actualidad donde los Santos de los Últimos Días son miembros del electorado (o tiene el derecho a votar) Es el pueblo quien no debe olvidar el estar vigilando que la libertad y rectitud del gobierno y pueblo se vea amenazada. Como miembros de la Iglesia debemos usar el derecho al voto (durante elecciones de gobierno) e influenciar positivamente en rectitud entre nuestros vecindarios y ciudades.
La Primera Presidencia en 1998 animo a los miembros a participar en la política y en asuntos de la comunidad de manera que los miembros de esta iglesia propongan gente buena y recta en sus comunidades tal y como el Señor lo declaro al Profeta Jose Smith 10 Por tanto, debe buscarse diligentemente a hombres a honrados y sabios, y a hombres buenos y sabios debéis esforzaros por apoyar; de lo contrario, lo que sea menos que esto del mal procede. (D&C 98:10)
Hace muchos años (Abril del 76) el Presidente Ezra Taft Benson (Miembro del Quórum de los Doce en ese entonces) aconsejo cumplir con nuestro deber en la vida pública, recalcando que no podemos ser solo espectadores.

Predicando la palabra de Dios

Usando el ejemplo de Alma del capítulo cuarto de Alma, el Elder L. Tom Perry recordó a los miembros de la Iglesia durante la conferencia general de abril de 1992 de la necesidad urgente de misioneros de tiempo completo.
“Aquellos fueron tiempos decisivos para Alma. En su cargo de sumo sacerdote de la Iglesia, había estado tratando de proteger a su pueblo para que no cayera en el pecado, predicándole el evangelio; en su cargo de juez superior había estado administrando las leyes del país. Al ver que la iniquidad del pueblo aumentaba, no podía continuar dividiendo su tiempo entre ambas funciones.”
“Alma comprendía un hecho básico de la vida: los problemas de la humanidad no se pueden resolver a menos que a la gran mayoría se le haya enseñado un código de conducta al cual apegarse para que no caiga en el pecado. Desde el principio, el Señor estableció para nuestros primeros padres terrenales mandamientos y convenios que, si se cumplen y obedecen, nos mantendrán alejados del dolor y la devastación de una vida desenfrenada. Al considerarlas condiciones del mundo actual, deberíamos hacernos esta pregunta: “¿Cómo podríamos prevenir más eficazmente la perdida que resulta del aumento abrumador de los problemas espirituales, emocionales y físicos que afligen a la humanidad hoy en día?” Da la impresión de que utilizamos la mayor parte de nuestro tiempo y energías en reparar los daños causados por el pecado y no dedicamos bastante tiempo a enseñar a los seres humanos la ley del Señor a fin de que la establezcan como fundamento para gobernar su vida.”
“¿Expresará vuestra historia el gozo que habréis experimentado al predicar y enseñar el mensaje de nuestro Señor y Salvador a todo el que estuviera dispuesto a escuchar vuestra voz? Ojalá que decidáis, tal como Alma, salir entre los del pueblo a fin de predicarles la palabra de Dios, para despertar en ellos el recuerdo de sus deberes, para abatir todo el orgullo, las artimañas y contenciones entre ellos, a fin de que podáis rescatarlos y salvarlos con el peso de un testimonio puro.”

Seamos buenos vecinos
En el Libro de Mormón encontramos un ciclo de rectitud a la iniquidad. En Alma 4:5-6 observamos como en un año el corazón de la gente cambia por completo. En los versículos 8-10 notamos que los mismos miembros habían llegado a ser una piedra de tropiezo para los no miembros.
Evitemos ser una piedra de tropiezo para los demás. Como miembros de la Iglesia podemos abrir las puertas misionales a otras familias al seguir el consejo del Presidente Gordon B. Hinckley dado en la Conferencia General de Abril del 2000.
“Como Santos de los Últimos Días, tendamos una mano de amistad a los que no sean de nuestra fe. No actuemos nunca jamás con espíritu de arrogancia ni con una actitud de superioridad moral, sino que exterioricemos afecto, respeto y amabilidad hacia ellos. Somos sumamente incomprendidos, y me temo que gran parte de ello se deba a nuestra propia culpa. Podemos ser más tolerantes, más afables, más amistosos, mejores ejemplos de lo que hemos sido en el pasado. Enseñemos a nuestros hijos a tratar a los demás con amistad, con respeto, con afecto y con admiración. Eso surtirá un resultado mucho más satisfactorio que el de una actitud egotista y arrogante.” Pdte. Gordon B. Hinckley
Tomado de www.infosud.info

domingo, 8 de junio de 2008

NUESTRA PALABRA VALE MUCHO


El ser dignos de confianza es un elemento de grandeza humana. Por lo tanto, cuando una persona llega a ser digna de la confianza de Dios en todos los sentidos, usualmente llega a ser digna de la confianza de sus semejantes. Podemos usar un ejemplo que ilustra el grado de confianza que los miembros de la Iglesia tenían en el profeta José Smith. Lo siguiente fue escrito por Sara M. Pomeroy:
Mi padre se mudó de Nueva York a Nauvoó en la primavera de 1843. Por entonces yo tenía nueve años. Al día siguiente de nuestra llegada, me encontraba afuera, en el patio, cuando llegó un hombre a caballo y preguntó por mi padre, Tomás Colborn. Por supuesto que yo no sabía quién era ese caballero, pero había en su aspecto algo tan noble y digno que me impresionó profundamente.
Mi padre salió y le estrechó la mano cordialmente, llamándolo "Hermano José". Entonces supe que era el Profeta.
Estos eran días muy agitados. El Profeta había sido acusado falsamente de intentar asesinar al Gobernador Boggs, de Misuri. Porter Rockwell, un gran amigo del Profeta, había sido secuestrado y llevado a Misuri como cómplice, y su juicio estaba a punto de iniciarse. El Profeta le pidió a mi padre que le prestara cien dólares para pagar al abogado de Porter Rockwell, y mi padre se los prestó con gusto.
"Se los devolveré dentro de tres días, si estoy vivo", dijo el Profeta, y se fue.
Mi tía, la hermana de mi padre, se puso colérica. Le dijo: "¿Qué no sabes, Tomás, que nunca volverás a ver un centavo de ese dinero? Aquí está tu familia sin un hogar, y tú andas tirando el dinero".
"No te preocupes, Ketie", le contestó mi padre. "Si el Profeta no me puede pagar, no tiene que pagármelo".
Esa conversación ocurrió delante de nosotros, los niños, y yo me puse a pensar seriamente. ¿Pagará o no pagará? No obstante, yo tenía gran fe en que sí lo haría.
Llegó el día en que el dinero tenía que pagarse; era un día frío y lluvioso; y llegó la noche: las nueve, las diez, y todos nos fuimos a dormir. Poco después se oyó un toquido a la puerta. Mi padre se levantó y fue a abrir, y ahí, bajo la lluvia, estaba el profeta José.
"Aquí tiene su dinero, hermano Tomás". Se encendió una vela, y el Profeta contó los cien dólares, y dijo: "Hermano Tomás, todo el día he andado tratando de reunir esta cantidad, porque de ello dependía mi honor. Que Dios lo bendiga" (Hyrum L. Andrus y Helen Mae Andrus, The) knew the Prophet, Boockcraft, 1974, pp. 171,172).
Por lo tanto, la confianza tiene dos facetas que debemos y podemos desarrollar. Una es llegar a ser dignos de confianza; tener las cualidades que harán que otros nos vean como una persona a quien pueden y necesitan recurrir. La segunda es la capacidad de confiar, es decir, portarse como lo hizo David cuando se enfrentó a Goliat.